
El técnico argentino Diego Almirón estuvo bajo los reflectores tras la rueda de prensa previa al duelo de la Copa Libertadores entre Colo‑Colo y Fortaleza. Con la cabeza puesta en los dos puntos que necesita su equipo, el entrenador desmenuzó la alineación y la filosofía táctica que guiará a los chilenos en la noche de viernes.
Formación y jugadores titulares
Almirón confirmó una estructura 4‑3‑3, una de sus favoritas por la flexibilidad que brinda al pasar de defensa a ataque. En la línea defensiva quedó en la base la dupla formada por el capitán José Luis Valdez y el veterano Bernardo Espinoza, flanqueados por los laterales jóvenes José Luis Cañete y Hugo Carrasco, conocidos por sumarse al ataque cuando el equipo lo necesita.
El mediocampo se compone de tres piezas que combinan experiencia y dinamismo: el pivote defensivo Rodrigo González, el creador de juego Lucas Rivas y un volante más adelantado, Matías Fernández, quien suele buscar los desmarques profundos. En la delantera, el trío ofensivo lleva a Marco Gutiérrez como referencia central, apoyado por los extremos veloces Gonzalo Alarcón y Franco Díaz, ambos con historial de goles por contra.

Ajustes tácticos y estrategia contra Fortaleza
Almirón señaló que el objetivo principal será controlar el mediocampo y negar los espacios que Fortaleza suele crear al jugar por las bandas. Para ello, el entrenador ha pedido a sus laterales que mantengan una posición compacta, evitando que los laterales brasileños del rival se introduzcan con facilidad.
En ataque, la idea es aprovechar la velocidad de los extremos para lanzar contraataques rápidos, mientras Gutiérrez se mantiene como pivote central para recibir balones en profundidad. Se prevé también una rotación de posiciones en el tercer tiempo, con Fernández subiendo al frente para crear superioridad numérica en el área rival.
En caso de estar abajo en el marcador, Almirón tiene preparado un plan B: cambiar a un 3‑5‑2, incorporando a un defensa central adicional y sacando a un extremo para reforzar el centro del campo. Esta variante busca ganar dominio en el medio campo y forzar errores del rival al presionar en bloque bajo.
El entrenador también destacó la importancia de los balones aéreos, señalando que Fortaleza tiende a jugar larguillos en los momentos críticos. Por eso, González y Valdez trabajarán en la salida de pelota con cabezazos dirigidos al espacio entre la defensa y el mediocampo rival.
Con la táctica definida y los jugadores conocedores de sus roles, Almirón confía en que Colo‑Colo podrá imponerse o, al menos, salir del encuentro con un resultado que preserve sus posibilidades en la fase de grupos. El público, que ya se prepara para llenar el Estadio Monumental, espera ver un juego intenso, con la presión de los minutos finales y la certeza de que cada decisión del técnico tendrá un peso importante en el desarrollo del partido.
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