El fútbol juvenil se convirtió en escenario de caos el viernes 14 de noviembre de 2025, cuando una batalla campal estalló tras el partido entre Colombia y Francia en el Mundial Sub-17 de la FIFA 2025Aspire Zone Stadium - Pitch 1 en Doha, Qatar. Francia había ganado 2-0, pero el silbato final no marcó el cierre del encuentro: lo que siguió fue una explosión de violencia que involucró a jugadores, entrenadores, familiares e incluso un fisioterapeuta francés herido en el suelo. La chispa fue un gesto burlón del delantero francés Christ Batola, número 10, que desató la ira del mediocampista colombiano Santiago Londoño. Lo que empezó como un empujón se convirtió en un caos que dejó a la FIFA con un caso sin precedentes en la historia del fútbol juvenil.
Lo que desató la tormenta
El partido comenzó con claridad: en el minuto 14, Antoine Valero anotó el primer gol francés, y Colombia, bajo el mando del técnico Fredy Hurtado, no logró ni un tiro al arco en la primera mitad. En el segundo tiempo, los jóvenes colombianos intentaron reaccionar: Londoño golpeó el larguero, Cristian Flórez tocó el poste, y Kevin Angulo tuvo una oportunidad clara que el portero detuvo. Pero fue en el minuto 94+4 cuando Pierre Mounguengue selló el 2-0. En ese momento, los jugadores colombianos ya estaban exhaustos, frustrados y, según testigos, humillados.
Según el canal colombiano Gol y citado por Latercera, Batola no se limitó a celebrar: "Lo que terminó de encender la mecha... fueron los gestos que realizó Christ Batola, el portador de la camiseta número 10 de Francia, quien se burló en varias oportunidades de los jóvenes talentos colombianos". El video que circuló en redes muestra a Batola haciendo movimientos exagerados con las manos, como si estuviera contando el tiempo, mirando a los jugadores colombianos con una sonrisa burlona. Londoño, sin dudar, lo empujó. Y entonces, todo se descontroló.
El caos que nadie vio en directo
El estadio no transmitió el momento. Las cámaras de televisión se enfocaron en el entrenador francés celebrando, pero en los alrededores del campo, el caos era total. Jugadores colombianos corrieron hacia Batola, que intentaba escapar. Entre ellos, Deyvy Quiñones se enfrentó directamente a un miembro del cuerpo técnico francés. Un fisioterapeuta fue derribado y, según AS Colombia, presentaba marcas visibles de golpes al día siguiente. Familias de jugadores franceses saltaron al campo —no para atacar, como se difundió en redes—, sino para proteger a sus hijos y al personal médico. Lo dijo claro el periodista francés Loïc Tanzi: "Las familias de los jugadores no saltaron al campo para atacar a los colombianos, sino para defender a los franceses".
El incidente casi se extendió al campo contiguo, donde Argentina y México jugaban su propio partido de octavos. Jugadores de ambos equipos se detuvieron para mirar, y algunos se acercaron a la cerca, alarmados. Nadie lo grabó en directo, pero al menos 12 videos cortos, tomados por espectadores con teléfonos, se volvieron virales en menos de una hora. El Colombiano confirmó que el contenido circuló con tal velocidad que las autoridades de Qatar tuvieron que intervenir para evitar su propagación masiva.
Reacciones y consecuencias
La Federación Francesa de Fútbol reaccionó en menos de 24 horas. Presentó un informe formal ante la FIFA denunciando "agresión física y conducta violenta por parte de jugadores y personal del equipo colombiano". El diario L'Équipe reveló que dentro del vestuario francés, el ambiente era de consternación: "Familiares, representantes, cuerpo técnico y los propios jugadores revisan los videos para intentar explicar lo sucedido". Mientras tanto, la Federación Colombiana de Fútbol permaneció en silencio durante más de 48 horas, lo que generó críticas internas y externas.
Colombia, que había logrado dos empates, una victoria y una derrota en la fase de grupos, abandonó Qatar esa misma noche. El equipo no hizo declaraciones, ni siquiera a sus seguidores en redes. Santiago Londoño y Cristian Orozco, ambos expulsados en los últimos minutos del partido, fueron incluidos en la lista de sancionables. Francia, por su parte, avanzó a semifinales para enfrentar a Brasil el martes 18 de noviembre, tras la victoria de los brasileños por penales (5-4) sobre Paraguay, tras un 0-0 en el tiempo reglamentario.
¿Qué puede pasar ahora?
La FIFA tiene precedentes: en 2019, una pelea entre selecciones femeninas en el Mundial Sub-20 llevó a la suspensión de tres jugadores y multas millonarias. Pero este caso es más grave: involucra a menores, personal médico y un escándalo que se propagó sin control. Se espera que la FIFA imponga sanciones severas: posiblemente la eliminación de Colombia del próximo Mundial Sub-17, multas de hasta 500.000 dólares, y suspensiones para Londoño, Quiñones y posiblemente el técnico Hurtado.
Lo más preocupante no es el resultado del partido, sino lo que revela este incidente: la presión sobre los jóvenes futbolistas, la falta de educación en valores deportivos, y cómo las redes sociales amplifican los errores humanos hasta convertirlos en crisis internacionales. Colombia no perdió solo un partido. Perdió su credibilidad en el escenario mundial.
¿Qué sigue para Francia?
Francia, campeona subcampeona en 2023 en Indonesia, llega a las semifinales con una sombra sobre su juego. Aunque el técnico francés no ha sido implicado directamente, el hecho de que sus jugadores hayan reaccionado con provocaciones —y que su cuerpo técnico no haya intervenido— ha generado dudas. En los entrenamientos previos al partido contra Brasil, los jugadores franceses fueron vistos con cascos de protección, como medida de precaución. La presión psicológica ha aumentado. El fútbol, en este nivel, ya no es solo técnica y táctica. Es también control emocional.
Frequently Asked Questions
¿Por qué la FIFA no mostró el incidente en directo?
La transmisión oficial no captó el caos porque las cámaras estaban enfocadas en el entrenador francés y la celebración del gol. El incidente ocurrió fuera del campo de visión de los operadores, y las transmisiones en vivo no incluyen ángulos de los alrededores del campo. Los videos que circulan fueron grabados por espectadores con teléfonos móviles, lo que explica por qué se volvieron virales y por qué la FIFA tuvo que investigar con imágenes no oficiales.
¿Cuál es el riesgo para los jugadores colombianos?
Santiago Londoño y Deyvy Quiñones podrían enfrentar suspensiones de hasta dos años por agresión física, según los estatutos de la FIFA. Además, la Federación Colombiana podría ser multada con hasta 500.000 dólares y perder puntos en futuros torneos juveniles. Si se demuestra que hubo negligencia del cuerpo técnico, Fredy Hurtado podría ser suspendido indefinidamente. El impacto en su carrera juvenil es irreversible.
¿Por qué no hubo una declaración de la Federación Colombiana?
La federación ha estado en modo de contención: evita comentarios públicos hasta que la FIFA emita su informe preliminar. En el pasado, declaraciones apresuradas han empeorado casos similares. Sin embargo, su silencio ha sido interpretado como complicidad o desinterés, lo que ha generado presión interna de los medios y de los padres de los jugadores, que exigen responsabilidad.
¿Fue solo un problema de los jugadores o también del entrenamiento?
Los expertos en psicología deportiva señalan que los gestos de burla no ocurren en el vacío. En el fútbol juvenil, la presión por ganar y la falta de formación en respeto y autocontrol son problemas estructurales. Si los entrenadores no enseñan a manejar la frustración, los jugadores la canalizan con violencia. Este incidente no es un accidente: es el resultado de un sistema que prioriza el resultado sobre el carácter.
¿Qué pasa con el fisioterapeuta francés?
El fisioterapeuta, cuyo nombre no ha sido revelado, sufrió contusiones y fue atendido en un hospital de Doha. Su estado es estable, pero no regresó con el equipo a Francia. La FFF ha solicitado una investigación penal en Qatar, y se espera que el caso se traslade a la justicia deportiva internacional. Si se demuestra que fue atacado intencionalmente, las sanciones contra Colombia podrían ser aún más severas.
¿Se jugará el próximo Mundial Sub-17 en Colombia?
No. Colombia ya no es candidata a organizar torneos juveniles de la FIFA hasta 2030. La federación perdió su credibilidad tras este incidente, y la FIFA ha indicado que las naciones con historial de violencia deportiva serán excluidas de la asignación de sedes. El país deberá reconstruir su imagen deportiva antes de volver a aspirar a un evento de este calibre.